Testimonios, El Maestro

Mi primer encuentro:
(Una demostración de la Omnipresencia del Maestro)

De pequeño era un ser muy espiritual, lleno de devoción, algo solitario, me gustaba reflexionar sobre la muerte y el tiempo, me preguntaba: el porqué del cuerpo, del nacimiento en esta época, en esta ciudad y con estos padres, quería saber a qué se debía la diferencia entre las personas en sus dones, talentos y oportunidades socioeconómicas.

EL MAESTRO PÁVANAJÍ

El Maestro Pávanaji fue una de las personas más lindas que he conocido. Podría escribir horas sobre Pávanaji y contar mil anécdotas. Lo cierto es que hice muchos cursos con Él, y discutíamos de muchas cosas debido a mi formación científica, “ver para creer”, y occidental, “siempre cuestionando porqué”, lo volvía loco con mis preguntas, y Pávana, con esa paz que lo caracterizaba, siempre tenía una respuesta que calmaba mis dudas. La experiencia más maravillosa, y que nunca olvidaré, fue cómo me preparó para enfrentar la muerte de mi madre.

OM A MI MAESTRO DE YOGA SHRÍ PÁVANA, MAESTRO DE VIDA. A ÉL, A SUS SAGRADOS PIES DE LOTO ¡¡ REVERENCIAS !! ¡¡ REVERENCIAS!!

MI MAESTRO

En el año 1978/79, me encontraba en la puerta de mi casa en la zona céntrica de la ciudad. Presa de una gran preocupación con respecto a mi negocio, una casa de compra de oro y trabajos de taller. “Ay Dios”, repetía a cada instante, “si en este momento se me apareciera Jesús, le pediría que me saque de este negocio”. Levanté mis ojos llorosos y vi avanzar una persona alta, elegante, muy erguida, vestida de blanco, con cabellera enrulada atada atrás en la nuca y con una hermosa y larga barba entrecana que la hacía especial.

SHRÍ SHRÍ SHRÍ PÁVANA
Santo, Puro, Sagrado…
Reverencias al maestro que con sus sagrados pies pisó un espacio de la Tierra y la bendijo para la liberación de muchos. OM
Aparecía envuelto en un manto traído de algún lugar de Su amada India y los pies descalzos. La cabellera como nube encrespada le caía sobre los hombros; la frente amplia, luminosa; larga barba y una mirada profunda y serena completaban su imagen cautivante ante tanto resplandor divino.
Un antiguo sabio en tiempos modernos.

LA PÉRDIDA
Pude conocer el rostro viviente de Dios,
pero lo miré esquivo.
Pude estar con Él,
pero no aproveché el tiempo.
Pude contemplar Sus ojos, aquellos que reflejaban al Absoluto insondable,
pero yo estaba ciego.
Pude escuchar Su palabra vivificante,
pero yo no comprendía lo que me decía.
Pude de pronto atraparTe en mi corazón,
y en cambio lo llené a éste de cosas pasajeras.
Pude percibir la paz y la bienaventuraza que emanabas con Tu sola presencia,
Pero yo... no las contuve.
¡Oh Señor!, con Tu partida pude comprender la ilusión del mundo, por impermanente,

PARA MI GURUDEVA, el aspecto de Brahman de mi preferencia
La Naturaleza de Shiva, no puede ser comprendida por las mentes humanas ya que su entendimiento está más allá de las estructuras del pensamiento, las definiciones o los conceptos, es decir de lo que la mente misma es.
Es por ello, que cuando uno conoce a un ser que de alguna u otra forma lo manifiesta, éste ejerce, como lo hiciera un poderoso imán, una atracción intensa.
Y esto fue lo que me sucedió cuando conocí a Mario R. Puertas, Pavana Yoguiraya quien sería luego mi Maestro espiritual

EL AMADO MAESTRO SHRÍ PÁVANAJI
Por la Gracia del Señor descendió a este plano nuestro amado maestro Shrí Pávanají. Apiadándose de nosotros y sabiendo que Lo estábamos esperando para acabar con nuestro sufrimiento, esta Gran Alma, revestida de Máyá, surgió como una luz en nuestras vidas.
Era raro que una persona que alguna vez hubiese hablado con Él no lo recordara, y aquél que había entablado conversaciones espirituales lo recordaba, sin dudas, todos los días de su vida.

SHRÍ SHRÍ SHRÍ PÁVANA YOGUÍRAYA
¿Cómo describir a alguien “Indescriptible”?, las palabras no alcanzan, se amontonan en la mente tratando de expresar algo semejante a la realidad, pero no lo logran. Todo lo que se diga es poco para dar una idea real a alguien que no Lo haya conocido. Los que Lo conocieron entienden lo que digo. ¿Quién puede olvidarLo habiéndoLo conocido? ¿Cómo poder describirLo, sin que la vista se nuble por las lágrimas que brotan al bucear en Su recuerdo?, lágrimas de emoción, de devoción, de alegría y de añoranza.

MI MAESTRO
Describir al Guru, a mi Guru es una tarea hermosa, dentro de mí se agolpan los recuerdos de los momentos, las conversaciones y lo mejor de todo inolvidable para mí, la gran enseñanza que dejaron sus palabras.
El Maestro es como el agua para el sediento, en mí obro de esa manera, estaba perdida y me guió por el camino del Dharma, me dio las herramientas necesarias y como decía Él ya no pude aludir ignorancia.
Tuve un buen karma, encontré al Guru en esta vida, presencia que siempre me inspiró paz, respeto y calma.