Gloria de la noche de Shiva
(Shivaratri Mahima)

Adoración silenciosa al Señor Shiva, el Consorte de Parvati, el aspecto transformador de Brahman, conocido por los nombres Shambhu, Shankara, Mahadeva, Sadashiva, Vishvanatha, Hara, Tripurari, Gangadhara, Shulapani, Nilakantha, Dakshinamurti, Chandrashekhara y Nilalohita entre otros. Él es favorable hacia Sus devotos y les confiere inmortalidad y conocimiento divino. El Señor Shiva lleva a cabo la Tandava Nritya o Danza de la Muerte, al final del Tiempo, durante el Pralaya Cósmico, y Quien es en verdad Regenerador, no destructor.

Maha Shivaratri es la gran noche consagrada al Señor Shiva. Maha Shivaratri cae en Trayodashi, el decimotercer día de la quincena oscura del mes de Kumbha (febrero-marzo).

En el Shanti Parva del Mahabharata, Bhishma hace referencia a la observancia del Mahashivaratri que había hecho el rey Chitrabhanu cuando dio su discurso sobre el Dharma mientras yacía en un lecho de flechas.

En tiempos remotos, el rey Chitrabhanu, de la dinastía Ikshvaku, que gobernaba todo el Jambudvipa, estaba observando un ayuno de un día junto a su esposa durante el Maha Shivaratri. En ese momento, el sabio Ashtavakra llegó de visita a la corte del rey.

El sabio preguntó: “Oh, rey, ¿por qué estás observando ayuno hoy?” Entonces, el rey Chitrabhanu le explicó la razón para ayunar en ese día. Él tenía el don de recordar incidentes de su nacimiento anterior.

El rey dijo al sabio Ashtavakra: “En mi vida anterior, fui un cazador llamado Susvar. Me mantenía matando pájaros y animales para luego venderlos. Un día, estaba vagando por el bosque en busca de animales y fui sorprendido por la oscuridad de la noche. No podía regresar a casa; por lo tanto, busqué refugio trepándome a la copa de un árbol Bilva. Ese día, le disparé a un venado pero no tuve tiempo de llevarlo a casa. El hambre y la sed me atormentaban. Me quedé despierto toda la noche. Derramé profusas lágrimas pensando que mi pobre esposa y mis hijos estaban pasando hambre esperando ansiosamente mi regreso. Me entretuve arrancando hojas de Bilva y arrojándolas al suelo. Al pie del árbol Bilva, había un Shiva Linga. Las lágrimas y las hojas cayeron sobre él”.

“Cuando amaneció, regresé a casa, vendí el venado y obtuve comida para mí y para mi familia. Estaba a punto de romper mi ayuno cuando un extraño vino a mí y mendigó por comida. Le serví a él primero y luego comí. En el momento de la muerte, vi a dos mensajeros del Señor Shiva. Habían sido enviados para llevar mi alma a la morada de Shiva. Allí me enteré del gran mérito que había obtenido mediante la observancia del ayuno durante el día de Maha Shivaratri, a pesar de que lo había hecho inconscientemente, por accidente. Viví en la morada de Shiva y gocé de beatitud divina por largas eras. Ahora reencarné en esta tierra como Chitrabhanu”.

II

‘Shivaratri’ significa “noche del Señor Shiva”. Las características importantes de esta función religiosa son el ayuno estricto durante veinticuatro horas y la vigilia durante la noche. Todo verdadero devoto del Señor Shiva pasa la noche de Shivaratri en profunda meditación, mantiene vigilia y observa ayuno.

La adoración del Señor Shiva consiste en arrojar flores, hojas de Bilva y otras ofrendas sobre el Linga, el símbolo del Señor Shiva, y bañarlo con leche, miel, manteca, ghi, agua de rosas, etc.

Tras haberse completado la creación, Shiva y Parvati vivían en la cima del Kailas. Parvati preguntó: “Oh, venerable Señor, ¿cuál de los rituales observados en Tu honor Te complace más?” El Señor Shiva respondió: “La decimotercera noche de la luna nueva, Krishna Paksha (quincena oscura), en el mes de Phalguna (febrero-marzo) es conocida como Shivaratri, Mi Tithi (un día lunar) más favorable. Más que con baños ceremoniales, Mi devoto Me da gran alegría con sólo ayunar y ofrecerme flores, dulces, incienso y demás”.

“Ese día, el devoto observa una disciplina espiritual estricta y Me adora de cuatro formas diferentes en los cuatro Praharas sucesivos (períodos), cada uno de tres horas de la noche. La ofrenda de unas pocas hojas de Bilva es más preciosa para Mí que costosas joyas y flores. El devoto debe bañarme con leche en el primer Prahara, con yogurt en el segundo, con manteca clarificada en el tercero y con leche en el cuarto y último. A la mañana siguiente, debe alimentar primero a los Brahmanas y luego romper el ayuno tras realizar las ceremonias prescriptas. ¡Oh, Parvati! No hay ritual que pueda compararse en santidad con esta rutina simple.”

“Escucha, Mi Amada, acerca de un episodio que te dará una idea de la gloria y el poder de este ritual.”

“Vivía un cazador en la ciudad de Varanasi. Una noche, cuando regresaba del bosque con los pájaros que había matado, se sintió cansado y se sentó al pie de un árbol a descansar un rato y se quedó dormido. Cuando despertó, había caído la densa oscuridad de la noche. Era la noche de Shivaratri pero él no lo sabía; se subió al árbol, ató los pájaros muertos a una rama y se sentó a esperar que amaneciera. Sucedió que el árbol era Mi favorito, el Bilva.”

“Debajo del árbol, había un Linga. Él arrancó unas pocas hojas y las arrojó al suelo. El rocío de la noche cayó desde su cuerpo. Yo estuve muy complacido con esas pequeñas ofrendas involuntarias del cazador. Al amanecer, él regresó a su casa.”

“Con el correr del tiempo, el cazador cayó enfermo y exhaló su último aliento. Los mensajeros de Yama (el dios de la Muerte) llegaron a su lecho para llevar su alma a Yama. Mis mensajeros también se presentaron en el lugar y lo trajeron a Mi morada. Hubo una gran lucha entre los mensajeros de Yama y los Míos. Los primeros fueron derrotados. Ellos informaron de lo sucedido a su señor. Entonces, Yama se presentó en persona a las puertas de Mi morada. Nandi le explicó acerca de la santidad del Shivaratri y el amor que Yo tenía por el cazador. Entonces Yama Me entregó al cazador y regresó rápidamente a su morada.”

“El cazador pudo entrar en Mi morada y protegerse de la muerte con solo haber ayunado y haberme ofrecido unas pocas hojas de Bilva porque era la noche de Shivaratri, a pesar de que lo había hecho involuntariamente.  Tales son la solemnidad y la santidad de esa noche.”

Parvati estuvo profundamente impresionada con el discurso del Señor Shiva acerca de la santidad y la gloria del ritual. Se lo contó a Sus amigas, quienes a su vez se lo trasmitieron a los príncipes que gobernaban la tierra. Así se esparció por todo el mundo la santidad del Shivaratri.

Swami Shivanandaji
Del libro “Lord Shiva and His worship”